Camarada,
En la vida hay momentos en que uno tiene que parar la carrera diaria, tomar aire y ver dentro de uno mismo para renovar el espíritu y ajustar la brújula.
Es un momento difícil.
No es fácil ver cara a cara a esos miedos enclaustrados en las esquinas del corazón obstaculizando el paso de las ideas y de los nuevos proyectos.
Hay que tener el doble de valentía al desempolvar el recuerdo de errores que han costado mucho o poco.
Dejar de aferrarse a esos salvavidas futiles acumulados por el paso de la vida puede significar un ahogo emocional.
Ese momento requiere de lucha. Combatir prejuicios, las ideas pesimistas y las malas experiencias que agrietan el corazón para dar paso a un aire nuevo; y despúes convertir el mismo nuevamente en terreno fértil.
Es una lucha a muerte. Pero vale la pena.
Te propongo, camarada, que libremos esa lucha hoy y te prometo que al final veremos el sol asomarse por esa grieta en nuestro corazón.
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Una lucha acuartelada y de trincheras sin duda, que unos no la ven venir hasta que es muy tarde.
ResponderEliminarMuy buen post! Abrazote